todos estamos igual

viernes, 31 de enero de 2014

Antojo (un antojo diferente cada noche)

Desde el martes 4 de febrero a la medianoche por FM La Tribu. 88,7. Online





Domingos a jueves a la medianoche por LA TRIBU 88.7 FM

Música, cine, una historia de la filosofía, libros, poesía, calor, frescura, tibieza, vientos, huracanes, brisas, calma chicha, chicha, limonada, el contado con liqui, el post neoliberalismo, el post post modernismo, buenas vibraciones, piñas, Piglia, la Incredible String Band, las 62, el 68, el 69, los 70, el amo, el esclavo, los gitanos las confesiones, la inseguridad, el caos de tránsito, el periodismo en la pendiente, la revolución, los chicos de la playa, las chicas de tapa, Wittgenstein, Cuervo, Maxi, el hermano perro, los elefantes, el gusanito, la pelicana, el androide, los 100 mejores disco del rock argentino y lo que se nos cante cada noche.

jueves, 30 de enero de 2014

Puta fama: Julia Mengolini está chocha con la nota contra la cumbia que publicamos el miércoles


No sabemos si la feminista de Duro de Domar también celebra la conversación entre dos dirigentes nac&pop para ver si le permiten a una compañera tomar vino con fanta.


CHE CUMBE PUTA FAMA from Cumbiemoselmundo on Vimeo.

La mentira del dólar blue: ¿cómo es que sube si nadie compra?


Los voceros de la derecha sigue catastrofeando porque necesitan empujar al país a un estallido pero no les está saliendo. En los últimos meses el dolar blue y su "imparable ascenso" fue el principal argumento para fogonear expectativas de desmadre. Hasta ayer al menos, los diarios y portales del golpismo ponían la cotización del dolar blue en todo lo alto. Pero resulta que desde hace días se trata de una cotización dibujada: porque nadie compra y nadie vende dolares a ese precio. A las cuevas les conviene trasmitir esa data porque desde las meidas económicas tomadas por el gobierno la semana pasada, el negocio se les pinchó. Y la derecha necesita comunicar ese precio de fantasía como si fuera un indicador de algo y apostar a una suerte de profecía autocumplida (difundir un precio alto que no existe para hacerlo subir). Leemos en Ambito Financiero:

Por Pablo Jiménez.-

Cuevas resisten con inflador en mano, pero ¿hasta cuándo?


"¿Cuánto está el dólar (blue)?", preguntan de un lado del teléfono. "$12,85, sube 25 centavos, pero no hay ventas", responden en las cuevas. La charla se repite casi calcada marcando otros números, en las consultas a más una decena de cambistas clandestinos que este medio hace diariamente para trazar un promedio de la cotización del billete en el mercado informal. 

La pregunta es por qué sigue escalando si casi nadie compra. La respuesta no es compleja. En los últimos meses la brecha que llegó a estar al 100% entre el oficial y el paralelo dio ganancias grandes a los cueveros y arbolitos. En estos primeros días de flexibilización, no les queda otra que elevar el precio y tratar de que el margen de ganancias no se derrumbe tanto. Es que el volumen negociado en el mercado marginal cayó un 50% respecto a la semana pasada y es apenas una décima parte del alcanzado en el momento de esplendor para los operadores del blue, allá por las vacaciones de invierno de 2013. 

La estrategia de las cuevas chicas es clara. Buscan "resistir al negocio" porque saben que, a diferencia de algunas financieras que comenzaron a prever alternativas, ellas no tienen mucho margen para "reconvertirse". Es por eso que desde el viernes pasado, cuando las ventas se vinieron abajo en picada, optaron por sacar el "inflador" para subir el precio y agrandar las puntas compradoras y vendedoras. Quien iba el viernes o lunes a vender dólares en las cuevas recibía $ 10,15 mientras que si necesitaba comprar se lo vendían a $ 12,15, una diferencia de $ 2. Esos márgenes, que en algún momento de la jornada llegaron a ser de hasta $ 3, no se habían visto jamás en la zona caliente de la city. 

Otro movimiento fue mandar a los arbolitos a merodear la puerta de los bancos a "pescar" a los clientes que no puedan comprar el dólar "ahorro", sea porque no pueden justificar ingresos, porque demandan más de lo habilitado o porque su banco aún no ajustó el sistema correctamente. "Vamos a ver si los bancos nos dan una mano y hacen más lento el sistema. Ahora sólo pasan por acá los que no pueden comprar en el banco y necesitan con urgencia. Los que no tienen necesidad, esperan a comprar en el mercado formal", reconocen en una cueva de alto tránsito de la calle Corrientes. 

"La suba del precio es porque hay que hacer diferencia y porque de última ya tendremos tiempo a bajar si es que la gente no aparece", reconoce otro comerciante... 
(seguir leyendo acá).

miércoles, 29 de enero de 2014

Masters of sex y las diosas griegas



por Julieta Eme

En esta nota, intentaré trazar algunas analogías entre los personajes femeninos de la serie norteamericana Masters of sex y las diosas griegas. O mejor, entre los personajes femeninos y los arquetipos conformados, a grandes rasgos, por estas diosas (para más detalles, ver el libro Las diosas de cada mujer de Jean Shinoda Bolen).

Masters of sex es una serie que cuenta la historia de William Masters (1915-2001) y Virginia Johnson (1925-2013), dos investigadores (ginecólogo él, psicóloga ella) que revolucionaron la sexualidad humana en la década de 1960. La pareja está interpretada magistralmente por Michael Sheen y Lizzy Caplan.

Virginia Johnson, sin duda, representa el arquetipo de Artemisa. Artemisa es una de las tres diosas vírgenes. Sabe que en una sociedad patriarcal las mujeres ocupan los lugares subordinados, así que decide apartarse de los hombres, para conservar su independencia y lograr sus metas. Artemisa, además, ve a las otras mujeres como a hermanas, las cuida y las protege. Cuando una mujer Artemisa llega a una posición de poder o privilegio, utiliza esa posición para hacer visibles los problemas de las mujeres y, sobre todo, para buscar formas de empoderarlas. Y Virginia tiene todos estos rasgos. En las investigaciones que conduce con William Masters, incorpora siempre el punto de vista femenino. Porque, en una sociedad patriarcal, ¿quién se va a preocupar y ocupar de nosotras si no somos nosotras mismas? William Masters, sin duda, no va a hacerlo.

Pero Virginia tiene algo también de Hera, ya que, en el pasado, estuvo casada. Y tiene algo de Deméter, ya que es madre de una nena y un nene. Y tiene mucho de Afrodita, ya que, según algunos personajes masculinos, es una excelente amante.


La doctora Lillian DePaul (interpretada por Julianne Nicholson) encarna el arquetipo de Atenea. Atenea es otra diosa virgen. Pero en vez de apartarse de los hombres, yéndose al bosque (como hizo Artemisa), Atenea se queda en la ciudad. Una mujer Atenea quiere triunfar en el patriarcado, quiere alcanzar las mejores posiciones y probar que puede sola. Y una vez que alcanza posiciones de privilegio, no ayuda a las otras mujeres ni se preocupa por ellas. La doctora Lilian menosprecia a Virginia por varias razones: 1) Virginia es femenina y utiliza a su favor esa feminidad. Lilian, en cambio, desea y tiene una apariencia masculina, 2) Virginia es una estudiante mientras ella es una profesora, 3) Virginia es la secretaria de un doctor (William Masters), mientras ella es doctora, y 4) Virginia no tiene marido, pero corre todo el día detrás de los pedidos, deseos y necesidades de su jefe. Lilian, en cambio, no tiene marido ni jefe. Ha alcanzado una posición en la que ya no depende de ningún hombre.

De todos modos, por razones personales, Lilian sí tiene una preocupación real y sincera por la salud de las mujeres, lo cual hará que Artemisa y Atenea se terminen acercando y que Virginia, muy de a poco, se vaya ganando el respeto y la simpatía de Lilian.

Libby Masters (interpretada por Caitlin Fitzgerald) representa el arquetipo de Hera, la esposa de Zeus. Esta diosa no era una diosa virgen. Se casó con Zeus y fue constantemente engañada y humillada por su marido. Pero Hera valora el matrimonio y desea ser una esposa por encima de todo. Libby es la típica Susanita (diríamos nosotros) que quiere casarse, cuidar a su marido y tener muchos hijitos. Pero el destino no parece favorecerla.

Si bien Libby puede parecer una tonta que se queda al lado de un hombre que dudosamente la quiere, creo que no lo es.

Hay otros personajes femeninos muy atractivos y encantadores, como Betty DiMello (interpretada por Annaleigh Ashford), la prostituta lesbiana que ayuda a William Masters en el comienzo de sus investigaciones, Jane Martin (interpretada por Heléne Yorke) quien no duda en participar, en nombre del progreso de la ciencia, de los experimentos de Masters y Johnson, y Margaret Scully (interpretada por Allison Janney), la esposa del rector de la Universidad / Hospital donde trabaja Masters, quien después de un matrimonio de casi toda la vida, se da cuenta de que sabe y entiende muy pocas cosas.


Y, finalmente, tenemos a nuestro dios griego, Zeus, William Masters. William es un hombre apasionado por su profesión y su trabajo que tiene una vida personal sorprendentemente fría. Es un ginecólogo, especialista en infertilidad. El mejor de todos. Ha logrado que parejas desahuciadas pudieran tener hijos. Los hijos se conciben teniendo sexo. Pero, acerca del sexo, no sabemos nada. Y Masters tiene el deseo de descubrirlo todo. Se da cuenta de que el sexo es aún un territorio inexplorado y él quiere ser el primer aventurero.

Dije que Libby podía parecer una tonta pero que no lo era. Todos los personajes de la serie están atrapados por sus propios miedos y por los prejuicios de la sociedad en la que viven. Pero todos los personajes están buscando un poco de pasión en un mundo que parece haberse olvidado de ellos. O en el que ellos se han olvidado de sí mismos. Luchan y se esfuerzan por alcanzar un poco de felicidad para sus vidas. Y cuando una los ve, desea que ojalá puedan lograrlo.

NOTA: para más recomendaciones de series de 2013, pueden ver acá

martes, 28 de enero de 2014

Cumbia, mierda, contracultura y Ricardo Iorio

Respuesta de Gabriel Medina, en polémica con mi post Puta fama (o el buen gusto como prejuicio del rockero pequeño burgués)



Qué linda era mi contracultura
por Gabriel Medina

GM: Yo no sé cómo permits que la compañera tome vino tres cuartos con Fanta´...
JP: ¿Qué pasa, Medina? ¿No es de progre el vino con Fanta? No hay que olvidarse nunca del barrio!
GM: Justamente,. porque no me olvido es que me parece que, como dijo, Ricardo, “hay que progresá'!”
J.P.-Tiene razón Medina. Tanto hacernos los wachiturros, nos estamos olvidando de los basamentos de la doctrina justicialista.
(Chat entre un dirigente de la JP Cámpora BA y un servidor)

Acuerdo con Gabis sobre el desafortunado uso de ciertos elementos de la llamada “música tropical” en el rock. (Le han hecho tanto daño como la impronta stone o ricotera que no deja de autotributarse endogámicamente.) Y no porque el arte deba mantener algún purismo, sino por el triste resultado del grueso de estas exploraciones, en donde se me ocurre que Kapanga y los Auténticos Decadentes puedan picar en punta (si incluimos a los últimos en el rock) junto con buena parte de la música nacional mtviesca al principio del nuevo milenio. Sé que esta discusión bordea el peligro del estigma de clase, que desde la pequeño burguesía filoprogresista en la que podríamos inscribirnos todos los interlocutores de este debate, suele ejercerse sobre los consumos culturales vergonzantes, ilegítimos, disidentes, plebeyos...

Dice Symond Reinolds en Después del rock: “Siempre que un investigador progresista se encuentra con la cultura popular negra sigue el mismo silogismo: Los negros son oprimidos, el rap es música negra. Por tanto tal música debe estar animada por corrientes de resistencia frente al modo en que las cosas son, por más sublimada y sumergida que esta resistencia esté”. Algún paralelo con la condescendencia populista hacia la cumbia podemos encontrarle al enunciado. El primer mal entendido es creer que la cumbia es la música que genuina y naturalmente emerge de los sectores populares, sin pensarla dentro del andamiaje industrial más amplio que le da sustento.

Por otra parte, la cultura popular (si apostamos a que tal cosa realmente existe), en términos de la dimensión política de sus representaciones, posee un carácter tan ambiguo como contradictorio. Es capaz de expresar insolentes rechazos al poder dominante, como de reproducir en instancias microfisicas y del modo brutal, esa misma dominación de la que es víctima.

Entonces la observación sobre la vulgaridad de lo que Gabis llama “sensualismo” es tachada de moralina conservadora [Nota del editor: Medina se refiere al post "Puta fama (o el buen gusto como prejuicio del rockero pequeño burgués" que puede leerse completa acá]. Como quienes se escandalizan cuando el presidente Correa cuestiona el absurdo de que no legitimar el aborto significa no ser de izquierda. Y el recurso para demostrarlo es confrontarlo con el lugar conflictivo que la música de Manal encarnó hace cuatro décadas, como si por carácter transitivo, la cumbia deparara para nosotros un futuro Manal del que enorgullecernos.

En rigor, toda la apología a la sexualidad vital y provocadora que el rock invocó como elemento contracultural desde los 60s hasta entrados los 80s, hace mucho diluyó su carácter impugnatorio de la falsa moral burguesa, constituyéndose en cambio en uno de los principales argumentos de venta para Coca Cola, Levis o Burguer King. Igual que el propio rock. Quizá a Gabis, que como bien señala Cuervo acá, efectivamente enfrentó al establshtment cultural de su época, no se le escapa que “el sensualismo berreta” es el establishment cultural de hoy.

Esto no quita que en Gabis no pueda deslizarse la pretensión letrada que introduce Spinetta cuando le dice a Pipo Lernoud, allá en la génesis de todo, “¡Esto que estamos haciendo es arte!”. Y hablamos del arte con mayúsculas, que tiene su triste corolario cuando el Flaco, en ocasión de la tragedia de Cromagnon, acusa al público de Callejeros de ser “piqueteros del rock”.

Sin embargo ya no es la “pollera colorada” sino el “¡por atrás! ¡por atrás!” eñ motivo recurrente que se ha entronizado en la música de bailanta. Lo que para el rock (el “roquismo” es una categoría que nos puedes servir más) es accesorio, como parte de un repertorio más amplio de provocaciones, en la cumbia es constitutivo, y me permito dudar de que eso guarde relación con un estilo de vida en los sectores que la consumen. Antes bien, con ciertas representaciones que dictan e imponen sus artífices (productores y empresarios) que podrían resumirse en el escueto aforismo: “los negros cojen”.

Las reivindicaciones que desde los sectores medios piadosamente se hacen sobre la música industrial que consumen los sectores populares siempre la recuperan como objeto sociológico antes que como discurso representacional. Vale decir, no se recuperan las virtudes de la organización formal del discurso artístico. Esto nos pone en crisis. Habría que admitir agriamente que los consumos de masas son comúnmente pobres, no virtuosos, clichés... No se les exige lo mismo que al rock (cierto rock) o al folcklore. Se alude sí, a su origen (como justificación fundante) y aquello que tematiza, buscando elementos de corte social susceptibles de ser recolocados en torno a relaciones de poder, para decir: esta es música popular, es música genuina, es música resistente, etc, etc. La tentación populista radica en la clausura “esto es lo de los de abajo”. Y ese jauretcheanismo mal leído nos deja con la guardia baja para impulsar otro tipo de exigencias estéticas, y con ellas, otros modos de concebir el mundo respecto del entramado de las relaciones de poder en las que los sectores populares se encuentran inmersos.



Incursiones rockeras felices en la cumbia hay pocas. Recuerdo “En la rivera” de Bersuit (justamente en dúeto con La Mona) y mi conmoción al escuchar el lapidario “En la ribera/ en la ribera te culean/ El parapléjico te mueve/ el abuelo te chorea/ Y se culea/ Rebelión indigente/ Regala vida el agujero” y creo que la impostación plebeya en esa canción es un acierto. Hay allí una aproximación a cierto universo de sentido más profunda que el mero “menéa-menéa” a los que el género nos tiene acostumbrados. Hay sinsabores, victorias pírricas, crueldad y vitalismo de sobrevivientes. Pero es un gesto roquero...

La cumbia, sin embargo, ha mutado mucho en nuestro país en los últimos años. Atrás quedaron los Wawanco, los del Bohio y tantos otros que alegraron las noches de los “grasitas” en El Palacio de las Flores, adonde provincianos y migrantes limítrofes iban a reventar sus morlacos en los 60s y 70s. Atrás fueron quedando los Ricky Maravilla, Alcides o Pocho La Pantera y toda la camada picaresca que hizo su irrupción sobre el final del alfonsinismo. Magenta hizo la primer evolución hacia las bandas de teen-pop armadas por casting y. echando mano de melenudos venidos del metal a llevarse unos mangos con los gritos histéricos de las adolescentes, reconfiguraron la estética de la movida tropical. Suprimiendo las corporalidades disidentes. Borrado toda etnicidad que pudiera emerger como marca de clase.

Atrás quedaron incluso las bandas de cumbia villera y la insolente mueca de exclusión que reponía una “negritud genuina”, mientras la vinculaba a la celebración del delito y la violencia de género como caricaturesca reproducción de la violencia social de aquellos años. Los “villeros romanticos” como El Polaco o Nestor en Bloque, fueron el acto reflejo de la industria cuando las propias chicas de la bailanta empezaron a rechazar el “mal gusto” (para ponerlo en palabras de Gabis) de temas como “Haceme un pete”. Matiolis para unos, Flores de Piedras para otros...

En el último lustro, la violenta irrupción de reggaeton descolocó a unos cuantos, con intentonas de desarrollar el género en el ámbito local sin demasiada fortuna. Pero con los Wachiturros llega una nueva postal de época. En la Argentina de la exclusión no hay que ser chorro cuando hay capacidad de consumo para ropa pituca y motito. Visto en retrospectiva y asumiendo que estas representaciones algo dicen sobre lo que fue y es la Argentina, sin dudas que el kirchnerismo se hace sentir. En 10 años pasamos de querer ser chorros a estar pitucos. De la marginalidad delictiva a la inclusión/igualación (recuérdese el episodio L'acoste) por vía del consumo. Cuestiones para problematizar que exceden este post y la música bien gracias.

La prueba está en que no fueron los Wachiturros los que musicalizarón La otra, sino la mucho más amena propuesta de DJ Negro Dub y Che Cumbé. Mi amigo Santiago Alvarez me dijo, cuando le hice escuchar The Roots of Chicha (parafraseando el dicho “los americanos tocan rock y los ingleses un pensamiento sobre el rock”): “¡que loca la clase media! no hacen cumbia, sino un pensamiento sobre la cumbia...”. Y es que los amigos de DJ Negro Dub y Che Cumbé, con su inmenso talento, difícilmente puedan pasar por Mágico Boliviano de Constitución sin que un botellazo vuele a la cabina al minuto 3. Tal es la distancia que hay entre las afirmaciones de Gabis y los objetos indóciles que nos proponemos defender, pero que finalmente son lo que son y no lo que nos gustaría.

Conviven en el grueso de lo que podríamos denominar “música de bailanta”: composiciones básicas, instrumentaciones pobres, y letras trilladas (que rechazo hasta la alergia) con rituales de celebración de la corporalidad y el erotismo, liberaciones provisorias, aunque no por ello menos trascendentes o necesarias, y afirmación plebeya y carnavalesca de la pertenencia y la identidad colectiva (que reivindico y aliento).

Por eso. en vísperas de elecciones en la facultad, mi organización (la UES/MUNAP) pone cumbia wachiturra a todo lo que da. Es que mientras los troskos, la Cámpora o Marea Popular, con algo de desconcierto, le suben el volumen a Manu Chao o Calle 13, nosotros sabemos que con los Wachiturros solo acrecentamos nuestro estigma de primera generación de universitarios, de morochos colados en la universidad pública. Nos hacemos cargo de eso. Y eso rockea!

Pero en mi casa y para con mis sobrinos, porque aspiro a que lo popular puede ser otra cosa que una cagada de cuatro tiempos que echa mano de baterías electrónicas solo a los efectos de regatear sueldos de músicos, mientras limita su lírica a hacer rimar diminutivos alusivos las zonas erógenas, es que me puedo permitir la honestidad de gritar con el compañero Cristian Aldana: iiiLa cumbia es una mierda!!!


ACLARACIÓN: Los videos que ilustran este post fueron intercalados por el editor del blog. Para comprender cabalmente esta nota y las ulteriores respuestas que se van a publicar, es recomendable leer PUTA FAMA (O EL BUEN GUSTO COMO PREJUICIO DEL ROCKERO PEQUEÑO BURGUÉS, clickeando acá.

¿Qué ocurre en Argentina?

(Artículo de un periodista italiano)

por Gennaro Carotenuto

Es notable que cuando la especulación afecta a Italia la culpa es de ... la especulación, mientras que si el peso argentino pierde valor, la culpa es del gobierno de Néstor Kirchner primero, y de Cristina Fernández ahora. No todo anda de maravillas en Argentina (¿por qué habría de ser así?) y los datos macroeconómicos (el cambio peso / dólar, con el primero que ha perdido 16 % de su valor en 48 horas, la inflación, la desaceleración del crecimiento del PBI, la dificultad para crear empleo formal, incluso con una tasa de desempleo por debajo del 7%) no son indiferentes para la fortaleza general de las políticas redistributivas puestas en acción en el continente desde principios de este siglo. En particular, la salud de Cristina, evidentemente delicada, se presta a interpretaciones malintencionadas y tendenciosas por aquellos que no ven la hora de poner fin a la “anomalía latinoamericana”. Sobre los problemas de salud de muchos líderes de América Latina que han dado vuelta una página después de la larga noche neoliberal (las muertes de Néstor y Hugo Chávez, las enfermedades de Lula , Lugo y Mujica ...) se podría abrir una comparación audaz con la enfermedad y la desaparición igualmente temprana de Lenin y confiar en que no haya una analogía posible.

Hay que recordar, sin embargo, dónde estamos, en Argentina, en América y en el mundo. La realidad es que a pesar de la desaceleración del crecimiento económico impetuoso de los últimos años, la Argentina y la Latinoamérica integrada continúan reduciendo la desigualdad, un dato que enoja a los expertos de siempre, reunidos en Davos, que ven en América Latina un testimonio vivo de la falacia y la injusticia del modelo. En comparación con el final de los años 90, probablemente el momento de mayor desigualdad en la historia del país, el índice Gini que mide la desigualdad está ahora casi en la mitad. Para el PBI y el valor del dólar, los únicos parámetros que tienen valor en el mercado mundial, la igualdad es un estorbo, un valor negativo que impide liberarse al espíritu animal del mercado y la creación de riqueza. Para tomar sólo un ejemplo, uno de los muchos programas del gobierno ha permitido la creación en 2013 de 85.000 empresas industriales. Otro programa concentra los esfuerzos (los críticos hablan de gasto público clientelista) en la inserción en el mundo laboral de los jóvenes de clase popular de entre 18 y 24 años, que no son sino el terror de las clases medias racistas de siempre.

Estos (manipulados por los medios monopólicos de comunicación ) continúan viendo a esos "cabecitas negras" que vienen de la periferia, como el nudo de sus temores por la seguridad, piden la mano dura, miran a la derecha y son inducidos a creer que la libertad más importante es comprar y poseer dólares. No es así, la principal libertad es la de la inclusión social, la igualdad y las políticas redistributivas. Y fuera de los países centrales (y aun en ellos...) , como se evidencia con los problemas similares que tiene la Venezuela bolivariana, la justicia social y un alto nivel de gasto público destinado a las políticas redistributivas son incompatibles con los indicadores macroeconómicos que el modelo neoliberal pretende imponer a cualquier costo, incluso el costo humano.

Las políticas públicas dirigidas a la creación de igualdad y seguridad son, de hecho, vistas por los mercados internacionales como una venda sobre los ojos, y la caída del peso es una pistola apuntada sobre el país. La última vez, con la dolarización, se escogió el camino del sacrificio humano, la destrucción del Estado, la hambruna inducida por el FMI con miles de muertes por inanición, la desindustrialización del país y su remate total. Con todos los defectos y debilidades, la Argentina ha vuelto a abrir escuelas y hospitales, ha reducido la desigualdad a la mitad, y el momento actual, aún si se tratara del fin de un ciclo, es mil veces mejor qu aquel.

Traducción: Lidia Ferrari

lunes, 27 de enero de 2014

Con Gerardo Fernandez, el Ingeniero y el Licenciado Baleno analizamos todo, todo, todo (El Vermucito)



Esta foto del Vermucito no es de ayer, así que, afortunadamente, yo no aparezco

Ayer fui invitado al Vermucito, el programa conducido por Gerardo Fernández en AM Cooperativa, en el demencial horario de los domingos a las 9:00 de la mañana. En realidad era la última emisión en ese horario, ya que a partir de la semana próxima pasan a los sábados al mediodía.

Compartí la mesa y tuve el gusto de conocer al Ingeniero Néstor Sbariggi, al Lic. Baleno y a Guille Di Baja.

Antes de nuestra tertulia hubo una serie de entrevistas a economistas sobre el tema del momento, obvio: devaluación, pulseada con el poder económico concentrado y demás. Después, cuando llegó nuestro turno, pasamos por todos los temas de la coyuntura, el momento inédito para el kirchnerismo, Cristina y la cristina-dependencia, la sucesión del liderazgo K, los candidatos que se perfilan, Scioli, el desinfle de Massa y su lucha por mantener visibilidad, la prudencia del peronismo, los dilemas radicales y satélites, la política comunicacional, los errores del gobierno, los trenes, los cortes de luz, el síndrome del pato rengo, el sciolismo gaseoso, Alberto Fernández, la capacidad de Kicillof para la pulseada que se viene, la carencia de segundas líneas, lo que hacía Néstor y nadie hace, la capacidad de Cristina para elegir un sucesor, las PASO, Manal, los panaderos anarquistas, las bolas de fraile, la sintonía fina que no fue, la inequidad de los servicios subsidiados, el rock de la tercera edad y otros rubros igualmente importantes, decisivos, candentes y decisivos. E importantes.

Primera hora



Segunda hora



Tercera hora

Anticipamos los titulares de hoy en los medios de derecha: lunes negro, el mercado rechazó las medidas, fracaso del plan // Frente cumbiero meets Mad Professor // El 99 % de la crítica no entiende el punto de vista de Scorsese

Todo eso en un solo programa de La otra.-radio. Mucho más, en realidad (no olvidarse de los guitarristas). Clickear acá



El programa de anoche empezó con un párrafo de Aldo Ferrer al que vale la pena leer con detenimiento, porque parte de una caracterización del momento, que es política antes que económica, o más bien que no desliga la dimensión económica del conflicto actual como una cuestión técnica sino como una puja de poder. Diagnostica, plantea algunos escenarios deseables o indeseables, recomienda. Lean:

"Me parece que en esta circunstancia vuelve a aparecer el conflicto del proyecto de país. Porque desde la perspectiva neoliberal, esto es el resultado de haber hecho una política de otro signo. Y entonces esto le va a dar mucho espacio a la crítica neoliberal y también a la externa, porque la forma en que la Argentina resolvió su tema de deuda externa despertó un gran resentimiento en los mercados financieros. El tema está en cómo se da una respuesta a esta situación de una manera consistente con un proyecto industrial, de inclusión social, de reafirmación de la soberanía. El riesgo es que sigan perdiendo reservas, que no se estabilice el mercado y que se descontrole la negociación salarial. Creo que esta situación exige un replanteo del manejo de la restricción externa. Hay todo un tema de manejo político, de diálogo. Hace falta establecer una plataforma más amplia y consensuada". (“Reaparece el conflicto por el proyecto de país”. Completo acá)

Nuestro experto en economía hizo una escripción concisa del punto en que se encuentra esta lucha por la renta. Y nos animamos a anticipar los títulos que hoy van a instalar los medios de la derecha: a pesar de que el gobierno sabe que esta es una pelea de largo aliento, La Nación, Clarín y otros voceros de la recesión van a decretar hoy mismo que el mercado dijo no y que el plan (aún no implementado) fracasó. Sus deseos son algo más que solo deseos: la economía del miedo necesita inyectar miedo en la sociedad como factor que empuje a acelerar los tiempos. El modus operandi del violador económico sigue una coreografía que conocemos cada vez que quisieron acorralar a la democracia, para quitarle legitimidad política. O sea: no se juega hoy la cotización del dolar, sino torcerle el brazo al poder político.



Pero en el programa hablamos de una vertiente de la cumbia muy refinada y sutil, que no por eso deja de ser cumbia, es decir: con un pulso de baile irresistible. En Colombia hay una agrupación de jóvenes músicos llamada Frente Cumbiero, que hace poco se encontraron con uno de los precursores del Dub, Mad Professor (nacido en Guyana) e hicieron un disco exquisito del que pasamos un par de temas.

También escuchamos a un cumbiambero más tradicional, Aniceto Molina, remixado y acompañado por el rapper neoyorquino Ghostface Killah. Y escuchamos algo más de la música de DJ Negro Dub y Che Cumbé para P3ND3JO5.



Nada de esto nos impidió deleitarnos con una versión increíble de "La Cumparsita", interpretada por Leopoldo Federico y Roberto Grela, o duettos inolvidables como el de Spinetta con Tomy Gubisch, o Django Reinhardt con Stephan Grapelli, entre otras gemas que nos suele traer Cristian Bonomo.

Y junto a Martín Farina y Lautaro García Candela (del blog "Cuando el arte ataque"), hicimos un repaso de varias películas en cartel o por venir: El lobo de Wall Street (detenido análisis del problema del punto de vista en Scorsese), Spring Breakers, This is the end (chicos ricos lanzados al consumo desaforado), Escándalo Americano (decepción), La vida de Adelle (buena con algunos "peros") y This is not a film, a punto de estrenarse.



O sea que si el programa no les interesa, difícil que el chancho chifle. El programa se puede se puede escuchar clickeando acá.

domingo, 26 de enero de 2014

Las películas del momento: Escándalo americano, El lobo de Wall Street, La vida de Adele, Gravity, Museum Hours, Blue Jasmine...

Esta noche hablamos de cine en La otra.-radio. FM La Tribu. 88, 7. Online



Escándalo Americano: ¿La favorita del Oscar? ¿Cómo dijo? ¿10 nominaciones? ¿Le puede llegar a ganar a El lobo de Wall Street o Gravity? ¿Me está jodiendo? ¿Este subscorsese? ¿Este patchwork de oldies de los 70? ¿David O. Russell? Me está cachando, ¿no?


El lobo de Wall Street

POR QUÉ ALGUIEN COMO SCORSESE ES UN GRAN AUTOR CINEMATOGRÁFICO

Este es Scorsese por sí mismo. Uno de los últimos creadores de formas del cine americano. 

Scorsese hace lo que mejor sabe, abismar la conciencia subjetiva de los winners/losers de la sociedad USA. Pregunta qué es el punto de vista.

¿Por qué alguien es un buen director? Porque está del lado correcto: no. Porque juzga a sus personajes: no. Porque hace lindas imágenes: no.

¿Porque está en el bando de los buenos? No. ¿Porque condena a los malos? NO ¿Por ser llevadero? NO!

Scorsese hace la cosa tan bien que algunos se desorientan totalmente: esperan que condene la delación o condenan que perdone a los delatores. Como si el cine fuera el lugar del Juicio, un dispositivo judicial. ¿Debería Hitchcock condenar el asesinato en las bañeras?

¿Tendría Fassbinder que condenar el suicidio? ¿Tod Browning condenar el vampirismo?

Si el cine se dedica a condenar, ¿los jueces van a hacer películas?

Mucha confusión al respecto. Difícil que gane el Oscar: demasiado buena. (Hay más sobre esta película acá).


La vida de Adele: de Abdellatif Kechiche, película que me resulta difícil de analizar, quizás porque las ideas involucradas son demasiado sencillas: hasta diría simplonas. Pero efectiva en su funcionamiento orgánico. Se sostiene bien en su larga duración y se va diluyendo en el recuerdo. Un melo, en el fondo demasiado convencional en su concepto, a pesar de su audacia erótica, que parece exigir una respuesta intensa. A muchos críticos les ha encantado.Un sector menor la odia. Yo ni ni. Un interrogante a develar en el futuro de Kechiche. 


Gravity: de Alfonso Cuarón. Un milagro del mainstream. El cine americano (aunque el director sea mexicano) todavía puede encontrar formas nuevas para géneros que parecen haberlo dado todo. Su estilismo tan elegante, su forma tan depurada, parecen decirnos que aún el cine puede ser clásico sin parodiar ni restaurar ni ironizar ni camelear. Gravity plantea preguntas cruciales en la era de la imagen digital: ¿qué es el espacio cinematográfico? ¿qué son la pesadez y la ligereza? Cuarón muestra que tiene una gran visión cinematográfica y la viene desplegando sin prisa y sin pausa. Si sigue así, se va para la estratósfera.


Museum Hours: quedan pocas funciones para ver esta hermosa película de Jem Cohen. El hilo conductor no son las cavilaciones sobre los museos y las artes plásticas. Más bien forman parte de una deriva conversacional donde a los momentos hablados les siguen otros meramente mudos, o cantados. A veces las palabras pronunciadas aparecen en simultaneidad con imágenes aparentemente (o realmente) desconectadas de ellas: vistas de la ciudad de Viena, escenas callejeras, edificios, palomas, árboles, cielos, cables que atraviesan el cielo, restos de objetos tirados por la calle, basura, gente sola o acompañada.Conviene no perdérsela en las funciones que quedan: será difícil de conseguir una vez que baje de cartel. Más comentarios acá.



Blue Jasmine: ¿Queda algo por decir de Woody Allen? Mientras él mantenga su pulso cinematográfico inigualable, queda todo por decir. Larga vida a Woody.

Esta noche hablamos de cine en La otra.-radio. Crítico invitado: Lautaro García Candela. También viene Federico Kucher, periodista especializado en economía, para hablar de imaginen qué. FM La Tribu. 88, 7. Online

Guitarristas

Hoy medianoche en La otra.-radio / FM La Tribu / 88,7 / online





por Cristian Bonomo

O mejor dicho: si yo hubiese estudiado guitarra
habría empezado por intentar sacar esos solos
y esa manera de tocar.

Posdata: No es esta la única música que vamos a escuchar. Presentaremos también al Frente Cumbiero en su histórico encuentro con Mad Professor. Y a Aniceto Molina. Vamos a hablar de las películas del momento (Escándalo americano, El lobo de Wall Street, La vida de Adele, Gravedad, Her y otras), con Martín Farina y un crtico invitado: Lautaro García Candela. También viene Federico Kucher (Página 12), periodista especializado en economía, para hablar de imaginen qué. FM La Tribu. 88, 7. Online

sábado, 25 de enero de 2014

Devaluación, el 2015, el 2019 y el cambio climático: ¿habrá temperaturas de 50º C la semana que viene?

Mañana en El Vermucito, junto a Gerardo Fernández, el Ingeniero Sbariggi y el Lic. Baleno te sacamos todas las dudas. AM Cooperativa. DE 9:00 a 12:00... ¡de la mañana!

por el Lic. Baleno
Uno que siembra soja en sus 800 hectáreas viene y dice: "Toda la soja de la cosecha pasada la tengo en silos bolsa y no pienso vender, no necesito vender. La cosecha que haga este año también la voy a dejar en silo bolsa, puedo aguantar tranquilamente sin vender. Prefiero esperar, cuando necesite guita abro el silo bolsa y cuento cuantos granos es lo mínimo que necesito vender y cerrar la caja y que vengan con la cana a ver quien se hace matar por ellos". 
Ese es el pensamiento del sembrador mediano (quizás el grande no, quizás sea aun peor por tener mas espalda, en fin, que lo averigüen los funcionarios que para eso les pagan) una vez embolsado el grano lo guarda medio año como mínimo le guste o no le guste a Kiciloff.
Se empoderaron. En serio, no de pico. Y no los vas a correr por la tele.
Al que no le guste que levante la bandera blanca.
(Blog El Magma, clickear acá)

Devaluación y mientras tanto



En política es muy importante el "mientras tanto", porque la historia nos enseña que no se vive de triunfo en triunfo y la mayor parte de los tiempos son difíciles: eso fue así en la época de Jesucristo, la Revolución Francesa, en la de Lenín y también en el primer peronismo. En épocas de marea favorable, cualquier gil se sube al carro (y después tardás el doble en darte cuenta de que se pasó a la contra). El resto del tiempo hace falta seguir trabajando, aguantar los trapos, pensar mejor. El que vivió apenas algunas décadas en este país sabe que es más largo el tiempo de la dificultad. Lo mismo puede decirse del período actual: la mayor parte del tiempo el kirchnerismo estuvo por zozobrar. Eso es lo que, al menos a mí, me lleva a seguir. Si todo anduviera sobre rieles, me olvidaría un poco y me dedicaría más a otras cosas. Es lindo ganar elecciones y saber que tu posición es compartida por muchos, pero al otro día hay que seguir y seguir. Y seguir. Si hay algo de lo que podemos estar seguros es que el adversario nunca se da por vencido y la victoria se construye en una trama de pequeñas y grandes derrotas y aprendizajes.

Todo esto, que pueden parecer palabras vagas, lo quiero escribir porque hay que deslindar la vida política de las modas y de las tendencias instantáneas, en un mundo donde prima la instantaneidad. Yo podría escribir la frase más bonita e impactante para refutar al cretino que se cambió de bando y ahora se solaza con nuestra dificultad. "Devaluación y Ajuste", titula el quebrado: con qué poco lo quebraron. El asunto es que una frase bonita no termina con la tarea, no hay victoria definitiva y el presente es, siempre, lucha. La esperanza no está puesta en el resultado inmediato, sino en la justicia que, mientras tanto, logremos conquistar en nuestra posición.

Es decir: no hay historia más que la del mientras tanto.

De la devaluación, la perspectiva económica y la capacidad para recuperar terreno e ir más allá en nuestro proyecto hay que seguir aprendiendo y pensando, opinadores sobran. No quiero boludear con opiniones que se consiguen rápido y sirven nada más que para aplacar la angustia: veamos qué pasa, pensemos qué hacer.

Ahora quiero destacar tres textos de valiosos compañeros de rumbo, de distinta procedencia, formación y edad, los tres preocupados bien en pensar el mientras tanto. Me interesó leerlos, así como reproducir algo de lo que dicen:

Hugo Presman: 

"El control de cambio extendido fue necesario para parar la fuga de capitales que el gobierno de Cristina Fernández soportó desde sus inicios. Pero el mismo, al tiempo que paró la salida, terminó cerrando toda posibilidad de ingresos de capitales. El atraso cambiario empezó a afectar a las economías regionales fundamentalmente y fue perdiendo paulatinamente la función de anclaje de la inflación junto con el congelamiento de las tarifas de los servicios públicos por lo que se decidió una actualización del tipo de cambio oficial con una tabla de devaluación programada que indudablemente produjo una retención de exportaciones y un adelantamiento del pago de las importaciones. Las consecuencias negativas contradicen los objetivos perseguidos. Para tener un panorama del atraso cambiario basta señalar que del 2007 al 2011 la inflación anual promedio fue de alrededor de un 18% y el tipo de cambio se actualizó en un 7%. En el 2012 la brecha se incrementó en unos 10 puntos. En el 2013 la distancia anual se acortó.

"A su vez la brecha cambiaria actual que fluctúa ente el 60 y 70% acentúa la sobrefacturación de importaciones, la subfacturación de exportaciones, el contrabando y la triangulación desde donde se pueden entender incrementos inexplicables de las exportaciones de soja de Uruguay y Paraguay.

"He venido sosteniendo que la brecha cambiaria no puede ser analizada por la pequeñez del mercado marginal del dólar (lo que es cierto), pero lo que se omitía incluso desde los técnicos y periodistas económicos favorables al gobierno, es que dicha cotización influye sobre la totalidad de la economía en su nivel macro y micro.

"Ningún capitalista va a realizar una inversión trayendo dólares para que se liquiden los mismos al cambio oficial, cuando la brecha con el marginal tiene semejante magnitud. El gobierno, preocupado por la falta de ingresos de dólares y la sangría sobre las reservas por las amortizaciones de la deuda y pagos de intereses, ha establecido en los hechos cambios diferenciales para superar esta traba, para los exportadores que retienen exportaciones y para inversiones como las de Chevrón. Pero esto se concreta en un clima de corrida cambiaria, que inutiliza el instrumento, ante la expectativa que el gobierno tenga finalmente que claudicar con el golpe de mercado en desarrollo.

(...)"Postdata: La nota estaba concluida cuando el gobierno parece convalidar en la mañana del 24 de enero la cotización del dólar oficial que alcanzó en el día de ayer los $8, al tiempo que se regresaría al control de cambios limitado ( conocido tendenciosamente como cepo cambiario) de los primeros meses de instrumentación con una baja del pago a cuenta del impuesto a las ganancias sobre las compras de dólares, incluidas las destinadas a atesoramiento, del 35 al 20%, siempre que la AFIP de la autorización pertinente. Haber actualizado la paridad cambiaria era necesario, pero como decisión aislada es extremadamente insuficiente y en ese caso su efecto sobre los precios se hará sentir inmediatamente.

Toda medida tomada en frío sin la arquitectura política que implique jugar al ataque y no meramente calmar a los especuladores, sólo será, en el mejor de los casos, una tregua parcial y de corto alcance (Completo acá).

Juan Soriano:

"Por mi parte, me resulta muy impopular ésto como me parece impopular lo del impuesto a las compras en el exterior o el aumentito al bondi, o cosas así que paga el pueblo y no el empresario que nada en guita desde el 2003 en adelante. Lo mismo las empresas telefónicas o las energéticas, que tienen océanos de dinero AJENO.

"Impopular no implica ser gorila, ni de derecha, ni liberal, pero huele a cosa que no comprendo y a cosa que no quiero.

"Más acá, mientras todos los militantes sepamos dónde estamos parados, qué es lo que hay que hacer y seamos sinceros con lo que pensamos y decimos, la irreverencia del kirchnerismo seguirá viva: no tenemos que aceptar todo alegremente ni tenemos que justificar todo ni todo nos tiene que gustar (...)

"Será cuestión de esperar a la semana que viene, de rogar porque los controles funciones y de exigirles a todos los que tengamos a mano, que se decida por una jodida vez por un par de medidas que pueden ser populares y buenas para todos: yo me acuerdo de la felicidad de esas plazas cuando teníamos mucho por festejar, y tengo la esperanza concreta de que el kirchnerismo va a volver a hacer kirchnerismo, como lo hizo con el Progresar.

"Aunque esta de una de cal y una de arena me esté empezando a joder, es pertinente que comprendamos que no todo es color de rosas y que la política tiene cosas así.

"También, es necesario que les contemos a los más jovenes qué es un escenario de hiperinflación (éste no lo es ni por las tapas, ni de cerca) y que los preparemos para una eventual resistencia pacífica y militante, si un día el kirchnerismo no es más gobierno: muchos de nosotros militamos en épocas gloriosas y siendo los ganadores, no los perdedores. Es ahora cuando se tienen que poner de pie más que nunca las agrupaciones y los militantes, con sinceridad y valor, para poder comprender, militar, subir al barrio, y enojarse si algo no nos gusta". (Completo acá)

Abel Fernández:

"¿Por qué entonces se permitió la devaluación, se preguntará algún lector inocente, si queda? ¿El gobierno quería favorecer en esta ocasión a los productores rurales de la pampa húmeda, en su mayoría enconados opositores, a los de los cultivos regionales, algunos oficialistas y otros no, y, en general, a todos los que tienen stock para exportar, incluyendo tal vez Cargill, Bunge y Dreyfus?

"No lo creo. En mi opinión, lo hizo porque no tuvo otro remedio. En general, esa es la razón por la que todos los gobiernos, en todos los países, aceptan devaluar: porque ya no pueden sostener el valor de su moneda. Ningún Estado quiere recibir menos bienes por los billetes que él mismo emite, pero a veces tiene que aceptarlo. Recordaba en ese posteo del jueves que le pasó a Inglaterra tres veces, en la Gran Depresión, en 1967 y en 1992, para dar un ejemplo.

"Son los costos de la inflación – aunque no sea nac&pop, parece, hablar de esos temas – y/o de la falta de competitividad. Peor es no poder devaluar cuando eso sucede, por estar atado a una moneda ajena, como nos pasó a nosotros a fines de los ´90 y a algunos países europeos ahora.

"(...) Me interesa señalar en ese plano una muestra de la capacidad de reacción de este gobierno, a la que hago mención en el título, y en el bonito video de arriba donde aparece esa extraña pareja: Jorge Capitanich y Axel Kicillof. Donde anuncian que “autorizan a personas físicas a comprar divisas para fines de atesoramiento y bajan a 20% el anticipo del impuesto a las Ganancias“.

"Sobre esta medida en sí, y la forma – hasta ahora muy confusa – en que se va a implentar – voy a escribir más adelante. (Por ahora, me arriesgo con una predicción: el lunes no pasará mucho; y seguirá habiendo – al menos hasta que no se tomen otras medidas – un dólar “blue”, cuyo precio estará entre $ 11.- y $ 13.-).

"Puedo estar muy equivocado, pero ese no es el punto. Frente a una situación que es una derrota simbólica, el gobierno, mientras sus voceros todavía repiten pavadas, se da cuenta que debe producir hechos. Pueden ser acertados, o no; pueden significar – creo que es así – aceptar una realidad que no es la que se pretendía. Pero muestran la condición básica de un gobierno: Asumir la realidad, y gobernar. Sonará sectario, pero tengo que decir que es una cualidad peronista".
(Completo acá).

viernes, 24 de enero de 2014

Hija maldita

(Sobre Bloody Daughter, de Stéphanie Argerich)



por Liliana Piñeiro

La música (tan femenina, tan voraz) nos robó una mujer. Esa mujer que no fue (y esa chica que es) se llama Martha Argerich, la extraordinaria pianista cuya intimidad es entreabierta en Bloody Daughter, este documental que realizara una de sus hijas. Entusiasmada con el regalo que le hiciera su madre, Stéphanie utiliza su cámara para filmarla en diferentes momentos de su vida: durmiendo, desayunando, revisando fotos familiares, paseando por el Jardín Botánico en Argentina, conversando…Reúne todo ese material para la película, intercalando inclusive videos de archivo donde vemos a Martha, joven y bella, en diferentes lugares del mundo, sobrevolando sus manos sobre el piano para interpretar con maestría inigualable a Mozart, Chopin, Schumann, recibiendo la adoración del público, firmando autógrafos, concediendo entrevistas. Todo se intenta abarcar desde un ojo implacable: desde la picardía indescifrable de su mirada hasta la tensión previa antes de salir al escenario, desde la queja repetida hasta la sonrisa vital. Pero el objeto a filmar es imposible de ser atrapado, hay algo en su rostro que goza de una manera desconocida, y por eso resulta fascinante. Se necesitan otras voces que puedan dar cuenta de la complejidad de una vida santificada en el altar del arte. Así aparecen la abuela, las hijas, los amantes, esos otros que la rodearon sin tocarla: hay un núcleo esquivo en los dioses, y éste parece ser uno de ellos.



Víctima feliz de sus dones, la precocidad de Martha determinó su adolescencia, edad en que la música toma posesión de ella, y a la que queda fijada emocionalmente, con toda la riqueza y la pasión por vivir que la misma implica. Bajo el cabello canoso de sus 70 años se esconde una joven traviesa, con la libertad suficiente para encarar la vida por fuera de todo modelo esperable. Admirada y protegida por sus hijas, convoca el amor de éstas desde un lugar no precisamente maternal. Ya sea en la ausencia (en el caso de Lyda, su primera hija, pasó años sin verla) como en la presencia, siempre fue Ella, ocupando todo el espacio con la lejanía de las mayúsculas. Y sin embargo, en algunas ocasiones, supo ser una divertida compañera de juegos. No es casual que el documental comience con la escena en la que Stéphanie se convierte en madre, como si ese registro vincular se abriera para la joven sólo en ese momento. La inclusión de Martha es, entonces, la de un acompañamiento fraternal.

Una de sus últimas escenas es especialmente conmovedora: Martha y sus hijas conversan en un parque. Todas quieren saber algo más sobre esa madre que se les escapa. Una de ellas le pinta las uñas, y recuerda el impacto que le provocaba, siendo niña, la visión de su pie moviéndose sin cesar sobre el pedal del piano. En una suerte de fetichismo, ese pie es signo de un encuentro amoroso… Así sucede siempre: finalmente la música nos acuna, nos contiene, abre sus brazos gigantes y nos salva a todos.

P3ND3JO5

By Rodrigo M. Malmsten

Dedico este poema a mi querido y brillante Raul Perrone

Los rostros de los chicos
viajan en patinetas
buscando el amor, el sol, las lunas
las calles como senderos se abren
Perrone
rostros de barrio, bajo y sobre las luces
de una ciudad
barrio que envuelve como caricias
con sus celestiales
Ituzaingo es mítica
es Perrone
es luz de Dreyer
miradas dulces en la incertidumbre de los tiempos
viajando de alma en alma
de sexo en sexo
de rostro en rostro
de fantasmas que giran en el vértice del tiempo de las noches
Perrone corazón en corazón
P3ND3JO5
solos
sueltos
solos
locos
buscando los senderos de la libertad
en las voces perennes del cine mudo
antiguo viejo
pero contemporáneo
Perro/ P3ND3JO5/luces
y un espejo en donde se mira,
todos los personajes son Perrone
son su mundo, el universo oceánico
bajo el asfalto y las pistas de skate insinuante
mares que fluyen en los cuerpos de los adolescente
incansable en busca del otro/
bajo el manto del alba
Perrone, imagen/ P3ND3JO5
Perrone locura/ P3ND3JO5
amor/ P3ND3JO5/Perrone
Perrone
camara/ojo/pantintojo
Perrone/amor/libertad
Perrone Arte
Humilde, fuerza
P3ND3JO5
vida, silencios que viajan como peces
musicales que transitan el horizonte del hombre
amor
y del otro lado
el corazón de sus Alicias en el país
de la no maravilla, que se construyen
con las alas y esas sangre candente
de este
P3ND3JO5/Perrone
que es y será
los Soles del oeste bonaerense
por siempre jamás