jueves, 14 de marzo de 2013

Pancho I: en el mundo se nos cagan de risa

"Tenemos que caminar siempre en presencia de la luz del Señor, con una conducta irreprochable"


Todas las fotografías son de M.A.f.I.A. excepto la primera, la de los terroristas sonrientes.

En su edición de hoy el diario La Nación, tiernamente ilusionado, dice que al conocerse la noticia de la asunción del Papa Francisco la gente ganó la calle como en un mundial de fútbol. Ahora anuncia que la asunción va a ser trasmitida en pantalla gigante en el Obelisco. Es la máquina voraz de las imágenes. Pero la derecha se hace ilusiones de que el Papa entregador de jesuitas a la ESMA puede constituirse en un líder de masas y jefe de la oposición, en remplazo del fatigado Magnetto. Lo que tiene la derecha argentina es que es vaga y cree que puede cambiar el tablero político con un golpe de suerte externo, como la decisión de 40 abusadores de niños vaticanos o el fallo de un juez buitre en Nueva York. Muchachos: los liderazgos políticos se construyen con años de trabajo, no con golpes de suerte.

Estamos en la era de la saturación de las imágenes y esta canonización del falso franciscano va a hartar pronto. En cuestión de semanas Bergoglio puede quedar convertido en un mediático más. Me sorprende que los medios no reparen en que gastan a las figuras que exaltan, desde Lilita hasta el Ingeniero Blumberg, pasando por la hermanas Xipolitakis. Fíjate que esta foto de los nazis con la escarapela pontificia nos hace un gran favor y desmorona operaciones de blanqueo del Papa Guardia de Hierro, operaciones como las que intenta Pérez Esquivel porque no tiene el protagonismo de Verbitsky. Además tanto machaque mediático pone demasiada luz sobre el pasado de Bergoglio, hasta el punto en que en unos días aprendimos mas sobre su colaboración con el genocidio que en todos los años en que lo tuvimos acá en la Catedral.

Fíjense en la nota de hoy en el New York Times, un diario inequívocamente K: en el mundo se nos cagan de risa.


'The New York Times' tilda al nuevo papa de conservador, homófobo y machista

En un artículo editorial, se describe al cardenal Bergoglio como cómplice de la dictadura de Videla y contrario al aborto, al matrimonio gay y a la ordenación de mujeres

El nuevo pontífice, Jorge Mario Bergoglio, ahora el papa Francisco, es un conservador teológico que respalda enérgicamente las posiciones del Vaticano contra el aborto, el matrimonio gay y la ordenación de mujeres, y fue un colaboracionista de la dictadura de Videla, según un artículo editorial publicado ayer en el diario The New York Times.

'Guerra sucia'

Enfrentado a la izquierda argentina, según el artículo, se mostró menos enérgico en su oposición a ladictadura militar de Videladurante la década de 1970, cuando el país entró en crisis por un conflicto entre la derecha y la izquierda que se conoció como la 'Guerra sucia'. Se le ha acusado de conocer los abusos de los militares y no hacer lo suficiente para detenerlos, por lo que más de 30.000 personas desaparecieron o fueron torturadas o asesinadas. Fue el encargado de supervisar las actividades de la orden jesuita en Argentina, desde 1973 hasta 1979, y su actuación durante la guerra sucia ha sido objeto de controversia, aseguran en el artículo.
Así, en 2005, poco antes del cónclave que elevó a Joseph Ratzinger como Papa, el cardenal Bergoglio fue demandado formalmente por un abogado argentino por ser cómplice en el secuestro de dos sacerdotes jesuitas que manifestaban abiertamente su postura en contra de la dictadura y que él había expulsado de la orden una semana antes de que desaparecieran. Aunque la demanda fue desestimada, el debate ha continuado, con la publicación de artículos de periodistas argentinos y libros que parecen contradecir la versión de Bergoglio, con la publicación de documentos de la época y declaraciones de los sacerdotes y laicos que se enfrentaron con el cardenal.
Bergoglio, que siempre había negado cualquier implicación con la dictadura, testificó en 2010 que se había reunido en secreto con Videla y Massera para pedir la liberación de los sacerdotes. Al año siguiente, la fiscalía lo llamó a declarar sobre el secuestro sistemático de niños por parte de la junta militar argentina, un asunto del que también ha sido acusado de conocer pero no evitar.
Además, Bergoglio era la máxima autoridad de la Conferencia Episcopal Argentina mientras la Iglesia argentina se enfrentaba al escándalo del reverendo Christian von Wernich, ex capellán de la policía de Buenos Aires, que fue acusado en 2005 de colaborar en interrogatorios, torturas y asesinatos de prisioneros durante la dictadura. Las autoridades de la iglesia sacaron al padre von Wernich fuera del país y lo enviaron a una parroquia en Chile, bajo un nombre falso, pero fue detenido y llevado de vuelta a Argentina para enjuiciarlo. Así, en 2007, fue declarado culpable de 7 cargos de complicidad en homicidio, más de 40 cargos de secuestro y más de 30 de tortura, y fue condenado a cadena perpetua. Según el NYT, al padre von Wernich se le permitió seguir celebrando misa en la cárcel, y el cardenal Bergoglio nunca emitió una disculpa formal en nombre de la iglesia, ni se pronunció directamente sobre el caso.

Matrimonio y adopción entre homosexuales

El artículo pone énfasis en el enfrentamiento que el cardenal Bergoglio ha tenido con el gobierno argentino en los últimos años, especialmente contra el ex presidente Néstor Kirchner y su sucesora y viuda, Cristina Fernández de Kirchner, sobre temas como el matrimonio gay, el aborto y la adopción de niños por parejas homosexuales.
Así, en 2010, el ahora pontífice máximo de la Iglesia católica describió la ley para legalizar el matrimonio y la adopción por parejas del mismo sexo como "una guerra contra Dios" y "una maniobra del diablo". Una postura que Kirchner consideró como "medieval".

1 comentario:

julieta eme dijo...

los desprecio y los detesto.