todos estamos igual

domingo, 16 de septiembre de 2012

La cosa (el enigma de este mundo)

Las voces del cacerolazo esta medianoche en La otra.-radio. FM La Tribu. 88,7. Online


Como no nos gusta que nos la cuenten otros, vamos a ver y a oír la cosa con nuestros ojos y oídos. Por eso el staff de La otra.-radio, como tantas veces, quiso estar presente en el cacerolazo del jueves. Varios de nosotros en Plaza de Mayo, conversamos con la gente (algo que no hizo la tele: escucharlos).

Señora con cacerola: Habría que meterla presa y colgarla enl Plaza de Mayo a esta hija de puta.

La otra: ¿Vos decís colgarla en Plaza de Mayo?

- Sí, yo la colgaría en la Plaza de Mayo.

- ¿No te parece un poco demasiado duro?

- Es que realmente ella está haciendo morir a la gente de otra forma, hay muchas formas de morir… a los viejos… con la inseguridad que hay... ¿Qué es esto que está pasando, decime, eh? ¿Qué se merece esta mujer, eh? Esto es peor que la mente de Hitler, es la mente perversa rodeada de toda la gentuza que tiene alrededor, todas esas mentes. Aníbal Fernandez, Moreno, toda esa gente.

- ¿Pero vos comparás a este gobierno con Hitler?

- Sí, ¡solo falta que empiecen a pereguir a los judios!

- ¿Pero vos creés que por las elecciones no se puede...?

- ¡Pero si las elecciones las tiene compradas! ¿Qué elecciones?

- ¿Cómo es que las tiene compradas?

- Pero por supuesto, ¡si ahora va a hacer que la voten los chicos de 16 años!

- ¿Y vos decís que los chicos la votan a ella?

- Sí, todos los chicos de 16 años... no entienden nada, no saben, son hijos de padres que cobran planes familiares, y entonces es ahí donde ella hace la fuerza.

- ¿Vos decís que esa gente no tiene capacidad para darse cuenta de lo que pasa?

- Desde ya…


Desde Bahía Blanca (la ciudad en que recién esta semana la justicia ordenó investigar el papel que el diario La Nueva Provinicia jugó durante la dictadura; ver acá), Maxi Diomedi nos escribe: "El cacerolazo nos agarró acá. En realidad no acá exactamente sino a 100 km. Hoy a la mañana, cuando llegamos y leímos los diarios y los sitios de internet, nos desayunamos con los ecos de la cacerola porteña. Acá dejamos una galería de personajes “divinosh” repiqueteando sus cacerolas en el centro bahiense. Una sheñora dice que tiene 63 años y que nunca vio nada igual (she olvida de la dictadura, je!). Otro que sale a reclamar por “la dignidad del ser humano” y porque no quiere una Gestapo argentina. Una jubilada explica que no quiere ser Venezuela y aboga por la democracia (“monarquía no”, dice). Una señora que no quiere hablar y se corre como avergonzada. Y hay más: una que dice que estamos cautivos y habla de revanchismo, que en este país no se puede opinar de otra manera porque se es perseguido. En fin... ¡es muy agradable escuchar al pueblo (no solo bahiense, claro) expreshándose con esa claridad de ideas!".



Gracias, Bahía Blanca, ¡volvemos a Buenos Aires! (Buenos Aires is like a wild girl on heroin, thinkin' she's on top of the world, not knowing she's dying even if you show her the marks). ¡Adelante Plaza de Mayo!:



-¡Hola! Quería saber cuál es motivo por el que viniste...

- Todo, la inseguridad, la corrupción, la verdad que… ahora dicen que van a sacar los pasaportes. Me parece que nos estamos acercando a un modelo que nadie votó. Esto se está transformando en algo que ninguno de los argentinos votó. Todo el mundo quiere poder salir y entrar del país cuando quiere, comprar lo que quiere, escuchar y leer las noticias que uno elige, y no que le imponga el gobierno sus ideas… ¿Por qué criticar la contra y no aceptar las criticas y ver en qué puede mejorar?

- ¿Vos escuchaste que van a sacar los pasaportes?

- Sí, lo leí, por Internet, y es vox populi…

- ¿Vos pensás que nadie va a poder salir del pais?

- Con un permiso, que lo van a dar a dedo, a quien ellos quieran... Si cumplieran el modelo como dicen, seria buenísimo, pero la mitad se rasca y la otra mitad labura para mantenerlos.

Desde Italia, nos escribe nuestra amiga Lidia Ferrari:

Los blancos que imitan a los negros

¿No es impresionante que la derecha, o la oligarquía, o los garcas, o los "niños bien", o como quiera que se les llame tomen los recursos populares (léase manifestaciones en la Plaza de Mayo, piquetes en los momentos dorados del Campo) y “deban” manifestarse? ¿No resulta asombroso que quienes decidían los destinos -vida y muerte- de la mayoría de los argentinos, estén sentados en los banquillos como acusados y/o en prisión recurriendo a abogados defensores que se las hagan más liviana? ¿No indigna el cántico “el que no salta es un negro y K”, al tiempo que conmueve, ya que es una burda imitación de los negros que nunca pudieron ser escuchados sino a fuerza de bombos en la plaza. Sí, es cierto, estos suenan cacerolas, en lugar de bombos... Sí, es cierto, no habrán alcanzado la potencia de los negros del bombo, pero al menos lo intentan. Sí, es cierto, no entraron por la parte sur de la plaza como los negros, pero entraron a la plaza a manifestarse como ellos, porque nadie los escucha. Estamos viviendo un momento alucinante de la historia argentina (yo por desgracia de lejos). Los blancos y rubios imitan los procedimientos de los negros que detestaron y excluyeron siempre.
Lidia F., Treviso, 14/09/2012

Volvemos a Buenos Aires: muy recomendable la lectura de la nota de Beatriz Sarlo hoy en La Nación, con destellos de lucidez que desde la derecha nadie más tiene. La van a putear por esto:

... las críticas kirchneristas a la movilización del jueves se apoyan en datos y citan consignas indiscutiblemente escritas en las páginas de Facebook que propagandizaban la convocatoria. Allí se ha usado el lenguaje del odio contra los planes sociales y la asignación universal ("planes descansar" y "asignación para coger", entre otras frases), que no salió de la cabeza de Cristina, sino de una iniciativa presentada, hace años, por Elisa Carrió. Este despiste ideológico, la antipatía contra la política y el encierro dentro de los propios deseos indican el terreno fracturado en el que se mueve la protesta. (...)

Detestar al kirchnerismo no produce política. Y hoy, en cualquier lugar del mundo, afirmar la primacía absoluta de los derechos individuales (yo hago lo que quiero con lo mío) es una versión patética y arcaica de lo que se cree liberalismo.

Es injusto hacer responsables a los manifestantes de lo que les falta y les sobra a sus consignas. Su movilización indica que hay allí fuerzas dispuestas a jugar en el espacio público.

La responsabilidad cae del lado de intelectuales y políticos que no articulamos una interpelación progresista, democrática y autónoma. No supimos escribir las cosas mejor que en Facebook.

La seguimos hoy a la medianoche en FM La Tribu

4 comentarios:

Lidia Ferrari dijo...

Verdaderamente todo esto es muy extraño. Se quejan de no poder viajar. No vi tantos argentinos en Europa como este año. Ayer estuve paseando por Venecia (lujos de vivir cerca de allí) y me encontré con "montonazo" de argentinos. Hasta tomé mate con unos chicos en un puente frente al canal Grande. Cantidades de argentinos! no exagero. Me pasó lo mismo en agosto en Paris. Conozco muchos anticristinistas que se la pasan viajando, como nunca antes. Y precisamente se quejan de que no pueden viajar. Acá hay delirio colectivo. No le encuentro otra explicación.

Lidia Ferrari dijo...

Oscar, leí a la Sarlo. A propósito de su lúcido texto contribuyo con la siguiente reflexión: La Sarlo (Beatriz) tiene razón cuando dice que “Invalidar una manifestación por la composición social de sus integrantes fue un tipo de discriminación que se difundió precisamente para atacar al peronismo”. Su lúcido análisis viene bien a todas las partes del conflicto. Y se nota que cuando nos agarramos de los calificativos para aludir al del enfrente, hay algo que falta: La Política, sin más. Es cierto que estamos cayendo en el mismo pecado cuando enunciamos: salieron los de la Recoleta a cacerolear. Pero es que también las identidades se forjan en función de los apodos y las denominaciones que nos ponen los otros. Por ejemplo: un grupo de amigas comenzamos a llamarnos “las negras K”: varias son rubias y una vive en Recoleta (porque las hay K allí también). ¿Quién nos puso el nombre? ¿Nosotras? Los de enfrente nos dieron el nombre cuando cantaban “el que no salta es negro y K”. Entonces, ¿nosotras somos negras K y ellos rubios de Recoleta? ¿O es que nos construimos mutuamente? La denominación no designa el lugar donde, sino las ideas que portan consigo. Son tilingos de Recoleta, por los cánticos y las ideas (pocas) que sostienen y los sostienen. No los discriminamos, se discriminan solos y, sobre todo, discriminan con violencia, cuando cantan “el que no salta es negro y K”. ¿Qué intelectual los puede representar y en base a qué ideas de país, de sociedad, de política, de ideología a sostener? Dice acertadamente Beatriz Sarlo que esa “pobre gente” (O.C. dixit) no encuentra una representación política pues, dice: “La responsabilidad cae del lado de intelectuales y políticos que no articulamos una interpelación progresista, democrática y autónoma. No supimos escribir las cosas mejor que en Facebook.” Pero no hagamos mea culpa inocente prematuramente. Porque los medios, en los cuales se incluyen muchos intelectuales como la Sarlo, incluyendo Lanata, han rebajado el ejercicio de la intelectualidad y la política al carnaval de la injuria y el insulto. Hace bien en reconocerlo la Sarlo. Me parece que los que han propuesto entrar en la vía del odio y la infamia, no son los kirchneristas, precisamente.

juan dijo...

El despiste ideológico que evoca Sarlo, no es tal. Los testimonios que ustedes recogieron son una muestra del error conceptual de BS.
Creo, quizás me equivoco, que el deseo de la mayoría de los manifestantes del jueves no es producir política. La versión patética y arcaica de lo que se cree liberalismo es la que promueven, en general, los medios en los que colabora Sarlo.
Existe otra versión ? Alguna vez la conocimos en Argentina ?
Repudiar por anacrónica, fascista y absurda (en el peor sentido)la manifestación implica adherir ciegamente al kirchnerismo ? Personalmente, estoy lejos de pensarlo de esa forma.
Qué es lo que les falta a los manifestantes ?
Plata y posibidades de viajar ? No, Lidia Ferrari da un buen ejemplo más arriba.
Políticos que los representen ? Probablemente. Alguien con la fuerza y demagogia de Marine Le Pen sería un referente ideal para el 20 o el 30% de nuestro electorado.
A mi juicio, lo que esencialmente les falta a la mayoría de los manifestantes del jueves, es el intento de estructurar un pensamiento autónomo. Lo desean ? No lo creo.
Qué les sobra ? Lo que dicen que les falta.

saludos,
juan

julieta eme dijo...

muy impresionante la última frase de la nota de BS...